La exposición permanente del Museo Etnográfico de La Gomera explica al visitante la forma en la que la población de la isla se ha desarrollado económica, cultural y socialmente, utilizando diferentes estrategias de adaptación.
Se explica que la construcción del paisaje que hoy tanto nos identifica es producto de la relación dialéctica del ser humano con el medio a lo largo del tiempo; pero también de unas relaciones sociales desiguales, determinadas por períodos económicos de auge y crisis, emigración y tendencia al autoabastecimiento.
Por ello, utilizamos como hilo conductor de la exposición el propio relieve gomero, cuyas condiciones geográficas podemos calificar de escalonadas. Así, en la primera planta delimitamos según la altura, tres grandes áreas geográficas y sectores de la producción. La pesca (costa), la agricultura (medianía), y la silvicultura (monte). Por otra parte, consideramos el pastoreo como la actividad que toma el testigo de nuestras culturas más ancestrales y cuya práctica atraviesa todos los pisos altitudinales de La Gomera. Los objetos que aparecen expuestos materializan el nexo entre las palabras y la realidad del pasado.
La segunda planta se vincula con la primera porque corresponde a labores de carácter doméstico, siendo las personas que usaban y confeccionaban estos objetos las mismas que participaban en los sectores productivos expuestos en la primera planta. La industria textil, la cestería y la alfarería son los tres espacios expositivos ubicados en esta planta, acompañados de la recreación de una bodega y de un telar de La Gomera. El uso de estos útiles, tan comunes como diarios, hace del mundo tradicional gomero un ámbito donde se recicla continuamente, buscándose recursos creativos que permitían la supervivencia.
En este contexto se introduce el mundo del tambor y la fiesta, el folclore, porque entendemos estas manifestaciones culturales como un ámbito que sintetiza el espacio social de todas las labores cotidianas.
Por último, nuestro Silbo gomero, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad desde 2009, introducido en las aulas como parte del currículo escolar ya desde 1999. Este sistema de comunicación, subraya la importancia de las herramientas que los gomeros y las gomeras hemos usado en la adaptación a un medio tan agreste y tan nuestro, como es la Isla.